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La tapa de este jueves 
La anterior licitación resultó desierta por el bajo presupuesto, que fue actualizado. La nueva compulsa finalizará el 26 de octubre.
Con una actualización del monto correspondiente al presupuesto de obra, la Nación volvió a sacar a licitación una obra de importancia para los usuarios de la ruta nacional 33, como es la reconversión lumínica de la rotonda que intersecta esta traza con la ruta provincial 67, en el ingreso a Pigüé, un sitio por donde pasan miles de vehículos en forma diaria.
Los trabajos comprenden la puesta en funcionamiento de un sistema de iluminación con tecnología LED en todo ese sector, además de la ejecución de la instalación eléctrica correspondiente. Además, establece la desinstalación de las 21 columnas de luz –tanto las simples como las dobles- que actualmente funcionan en el lugar.
La obra ya había sido licitada, en mayo pasado, pero la compulsa había resultado desierta. En ese momento, el presupuesto oficial era de poco menos de 99 millones de pesos, pero había sido calculado en septiembre de 2022: en números actualizados, debería haber sido de más de 150 millones de pesos y ya en ese entonces se estimaba que ese valor podía suponer una traba para las empresas que quisieran presentarse.
Esto fue subsanado para esta nueva convocatoria. De acuerdo a lo señalado en el Boletín Oficial, el Proceso de Contratación N° 46/1-0225-LPU23, correspondiente al Sistema de Iluminación Ruta Nacional 33 – Intersección RP 67 – Acceso Pigüé, tendrá un presupuesto de 246.260.000 pesos, calculados a mayo último.
La apertura de los sobres con las ofertas será el jueves 26 de octubre y las ofertas deben entregarse en la dependencia local de la Dirección Nacional de Vialidad. El plazo de obra se mantiene inamovible: seis meses. Por esto, si todo marcha por los caminos y tiempos normales, se podría estimar que los trabajos estarían listos sobre mediados del año que viene.
El proyecto comprende la instalación de 60 columnas de altura libre de 12 metros y las correspondientes luminarias LED, además de la ejecución de las bases, conexión de artefactos y armado de tablero eléctricos en cada columna.
La firma adjudicataria también deberá encargarse de la construcción y puesta en funcionamiento de tablero general de comandos; gestión, construcción y puesta en funcionamiento del medidor de energía; realizar el tendido subterráneo de conductores eléctricos para la iluminación, reutilizando los caños tritubos de fibra óptica del kilómetro 27 de la ruta nacional 33; y llevar a cabo 56 metros de cruces bajo pavimento, utilizando los ya existentes.
Además, tendrá que retirar las columnas de iluminación simples y dobles existentes, y trasladarlas hacia la balanza ubicada en la ruta 33, en uno de los ingresos a Pigüé, sobre el kilómetro 131,5, y por último se encargará de la provisión y colocación de barandas de defensa metálicas tipo Flex Beam, tanto curvas como rectas.
La provisión de energía al sector correrá por parte de la Cooperativa Eléctrica local.
Por otro lado, la obra de reconversión lumínica de la rotonda de las rutas 33 y 67 contempla también el retiro del sistema lumínico que actualmente hay en ella, compuesto por 21 columnas metálicas tubulares de medidas varias, algunas con uno o dos artefactos lumínicos.
De acuerdo al pliego, todas deberán ser retiradas y trasladadas hacia el puesto de control de pesos y dimensiones ubicado en el kilómetro 131,5 de la ruta, frente a la dependencia de Vialidad Nacional. En ese sentido, se aclaró que no se permitirá su reutilización en la obra de la rotonda.
Según se explica, primero serán extraídas las luminarias, tarea que debe realizarse tomando las previsiones necesarias para recuperar las piezas con el menor deterioro posible y luego las columnas.
A continuación, se demolerá o extraerá el módulo de hormigón en todo su volumen o al menor hasta enrasar la superficie, si es que no está prevista obra alguna en dicho sitio.
Losas
En ese sector, sobre mediados de 2021 concluyó una obra de recambio de las losas de hormigón de la rotonda, junto con la incorporación de nueva señalética y la pintura de la cinta asfáltica. Los trabajos habían comenzado en agosto de 2020 y requirieron una inversión aproximada de 200 millones de pesos.
Hasta ese momento, el estado de la rotonda había sido la causa de un constante malestar para los conductores y vecinos de la ciudad, ya que en varios sectores era necesario circular por ella a paso de hombre, para evitar la rotura de los vehículos. Incluso, desde el propio municipio y Concejo Deliberante de Saavedra se había emitido un pedido para dar una solución al problema ya que, señalaban, el estado del lugar era entre malo y muy malo. (La Nueva)